El desierto del Danakil, Etiopía (por Jordi Ribas)

Etiopía es un país situado en el Cuerno de África con una gran cantidad de atractivos para el turista, fruto de su situación natural y privilegiada (Valle del Rift, meseta abisínia, etc.), su apasionante historia (castillos de Gondar, iglesias del Tigray, Lalibela, Aksum, etc.) y numerosos grupos étnicos que mantienen viva las tradiciones y la forma de vivir de sus antepasados. Pero uno de sus secretos más sorprendentes se encuentra situado en el "Triángulo Afar", zona desértica que engloba el noreste de Etiopía hasta la costa eritrea del Mar Rojo y Djibouti. Hasta hace pocos años, era una zona prácticamente vetada al turismo, pero hoy en día es posible descubrir sus tesoros a través de salidas organizadas.

Etiopía es un país situado en el Cuerno de África con una gran cantidad de atractivos para el turista, fruto de su situación natural y privilegiada (Valle del Rift, meseta abisínia, etc.), su apasionante historia (castillos de Gondar, iglesias del Tigray, Lalibela, Aksum, etc.) y numerosos grupos étnicos que mantienen viva las tradiciones y la forma de vivir de sus antepasados.

Pero uno de sus secretos más sorprendentes se encuentra situado en el "Triángulo Afar", zona desértica que engloba el noreste de Etiopía hasta la costa eritrea del Mar Rojo y Djibouti. Hasta hace pocos años, era una zona prácticamente vetada al turismo, pero hoy en día es posible descubrir sus tesoros a través de salidas organizadas:

 

Depresión del Danakil

Las placas tectónicas africana y arábiga se estan separando, formando el Gran Valle del Rift y creando zonas de gran actividad tectónica como se ve en el Danakil, con una gran cantidad de géiseres, lagos ácidos y volcanes que evidencian en un futuro lejano la separación de buena parte de África oriental del resto del continente, formando una nueva gran isla y la entrada del mar por lo que hoy en día es la Depresión del Danakil. El punto más bajo de África lo encontramos aquí, y las temperaturas son de las más altas del planeta (se llega hasta los 50ºC).

 

El lugar donde se encontró Lucy

El desierto de Danakil es el lugar donde se han encontrado los restos de homínidos más antiguos, como la famosa "Lucy" y la niña "Selam", de la especie Australopithecus Afarensis,  por lo tanto estamos hablando probablemente del lugar original de los primeros humanos.

 

Dallol

Dallol es un paisaje que parece de otro planeta, con lagos ácidos que forman minerales de colores amarillentos, rojizos y verdosos con tonalidades blancas, formas minerales con forma de paragua, un paisaje marciano que no se puede describir con palabras.

 

Volcán Erta Ale

Una de las joyas del Danakil, este volcán activo tiene la base por debajo del nivel del mar y un lago de lava espectacular que nos ofrece vistas únicas del magma. Se hace una caminata nocturna desde un campamento próximo al volcán para evitar las altas temperaturas y pasamos la noche en el campamento de arriba en el volcán, donde estaremos a tocar del cráter que nos ofrecerá una experiencia única, donde sentiremos la fuerza de la naturaleza y veremos como la lava se levanta metros e ilumina la que será sin lugar a dudas una noche mágica que no olvidaremos jamás.

Recomendable llevar una mascarilla o pañuelo, y una luz frontal o linterna para la caminata nocturna. 

 

Lagos salados

La Depresión del Danakil tiene grandes salinas que llegan más allá de la vista, con lagos salados como el Afrera y el Karum (conocido como Assal en Etiopía, no confundir con el lago Assal de Djibouti), donde desde tiempos inmemoriales se explota la sal, conocido aquí como "oro blanco" o amole. Nos podemos bañar en las aguas saladas para refrescarnos del intenso calor y ver como los trabajadores extraen la sal manualmente, una tarea dura que realizan en pleno sol. Veremos también caravanas de camellos provenientes de las tierras altas para llevarse el "amole", una ruta comercial que se remonta hasta los tiempos antiguos del Reino de Aksum y que sigue haciéndose de la forma tradicional.

 

Los afars

Los habitantes autóctonos de la zona son los afar (denominados también danakils), conocidos por su gran resistencia en un territorio tan hostil, viviendo de forma nómada y de la ganadería, siendo expertos en aprovechar los escasos recursos naturales de que disponen. Su fama de guerreros temidos han alejado forasteros de estas tierras durante siglos, pero hoy en día aceptan turistas siempre y cuando éstos actuen de forma respetuosa y sigan las normas locales, por esto es tan importante no visitar esta zona sin una planificación y hacerlo de forma organizada. A la hora de querer fotografiar a los afar, pedir siempre antes su permiso, si lo deniegan no hay que insistir. De esta forma seguro que disfrutaremos de su hospitalidad y simpatía, y tendremos una estancia única en un territorio excepcional.